Translate

14 febrero, 2024

Un rostro violento...

 Un rostro violento

mi rostro

se ha ido perfilando

en esta mañana

entre las sonrisas

adormitadas de los

apresurados caminantes.

¡Van a dar las ocho

y media!

Yo camino en diagonal

por la Plaza donde

aún duermen las terrazas

y los acontecimientos

del día anterior.

Sé que al doblar la esquina

alguien me regalará

un mensaje imprevisto

que aún no está

en los periódicos

ni en los mapas

o que encontraré al habitual

mendigo del Burger King

maldiciendo esta lluvia

fría de otoño mientras sueña

con una playa tal vez

sin saber qué día

es hoy o dónde

olvidó el sombrero

que llevaba puesto ayer.

Más allá, en el Campo

San Francisco los árboles

enfurecidos se desnudan

apresuradamente

y de las ramas penden

solo cuatro hojas amarillas

y versos de ausencia vegetal.

Tampoco hay pájaros, no hay

flores en las ventanas

y el reloj de la torre guarda silencio.

En breve llegaré a ese extremo

de la ciudad en el que he enterrado

tantas horas, tantos frutos decapitados.

No estoy cansado

y no tengo otra explicación

de por qué continuo

por esta ciudad que nace

y muere con todas

sus voces y obscenidades.

09 febrero, 2024

Nubes de estorninos...

 Nubes de estorninos

negros y sonámbulos

oscurecen la tarde

de los últimos poemas,

formas primitivas que defecan

por salmantinos parques y avenidas

disfrazando el azufre de la noche.

Ahora, es verdad, huele

a palabras excrementicias como

las primeras que Adán gritó

al sentir el sabor impuro

de aquella manzana. Pero

cuando amanezca todos

se precipitarán hacia

los semáforos abiertos

y tú tendrás emociones

paradójicas y desacordes:

dedicarte a limpiar las heces insolentes

o agitando los últimos versos

buscar nuevas palabras

en el diccionario e irte con ellos

hacia una pradera desnuda

llena de manjares líquidos

que los sueños nunca alcanzaron.

06 febrero, 2024

Me vuelvo una y otra vez...

 Me vuelvo una

y otra vez

y en el rastro

de las encrucijadas

en las que me detuve

no hay indecisiones.

Apenas asechanzas

absolutas y revolucionarias

que desconocían mi calle.

Tú ibas a caballo

y yo solo

quería anticipar

las multitudes

de puño indignado.

Aún hoy aprieto

involuntariamente

los dedos como

si sujetara aquel

cartucho de dinamita

alborotador y turbulento.

Pero los pájaros ignorantes

y adoquinados no se inmutan,

no temen que por mis ojos

corran vientos con la fuerza

tormentosa de los poemas

inspirados en el infierno.

No saben, no sospechan

que imaginando esos eriales

sube la temperatura

las nubes se desvanecen

y puedo aplastar infancias

y vejeces como si un juicio final.

05 febrero, 2024

Navegas sin temor...

 Navegas sin temor hacia

un atardecer con más perfumes

e invocas

todo lo que de ti

se perdió

el sol

la bruma

una mañana perezosa

una noche bohemia

aquellos lápices

con los que dibujabas

tampoco recuerdas qué.

Y en esta

paz de contradicciones

no necesitas más velas

para poner los pies

en una playa futura.

04 febrero, 2024

Escribo “cuchillo”...

 Escribo

“cuchillo”

y su filo inquieta

el primer y el último

verso como una línea

que divide

el poema

en dos

partes iguales

mitad vacío mitad

memoria guardada.

Con él hiero

mis seis años indiferentes

en aquel mítico Jardo

y nada es sangre

como si el ángel

de la guarda

en el que entonces

creía detuviera

el golpe.

                     Paso

entonces a la página

siguiente y las calles

resuenan como tambores.

Sé que ahora sí una

sílaba impía y hostil

podría romper todos

mis vasos sanguíneos

y no quiero

sucumbir

a la tentación.

03 febrero, 2024

A mediodía he llamado a Mery...

 A mediodía he llamado a Mery

y le he preguntado por sus nalgas

más bien por la compresión de la raíz L5.

Duele, me dijo, mucho.

Entonces una paloma atravesó

la avenida. No llevaba nada en el pico.

Y decidí sentirme como un centauro

capaz de perderme lejos del arca

ignorante de cualquier catástrofe inminente.

02 febrero, 2024

Esta mañana de Noviembre...

 Esta mañana

de Noviembre

hay una completa

ausencia de rimas

aunque en el horizonte

aún permanece

silenciosa

la luna llena

que anoche

presagiaba

innumerables

transformaciones.

01 febrero, 2024

Vienen de frente...

 Vienen

de frente,

una marea de no

poetas

y ni siquiera

una mirada

nos aproxima.

¿Cómo entonces

comprenderían

en su errático

deambular

que me deleito

con sus formas

que en estos versos

hablo

incluso

de la belleza

de sus hombros desnudos?

Si por un

instante

se detuvieran

como en un

escenario

de teatro

podríamos

juntos

leer

poetas bucólicos.

Sólo necesitan

desear

un puerto,

arrojar el ancla,

derrotar esa

brújula

desorientada

y olvidar

o mejor

escuchar todo

lo visible

lo invisible

a mi

que soy

el que en silencio

les ofrece versos

una tarde

tranquila

de regreso

a casa.

31 enero, 2024

Desde la ventana...

 Desde la ventana

del Callejón del Ángel

sacudo la alfombra

con aspereza de movimientos.

¡Nada se resiste, nada!

Ni el polvo, ni recuerdos

innumerables de los

que nuestros zapatos

se despojaron al volver

de la ternura de los caminos

o de los últimos andenes

insospechados.

30 enero, 2024

Los versos han dejado de ser inútiles...

Los versos han dejado

de ser inútiles!

Es verdad

que hay generales

que incendian adverbios

y sustantivos

pero las faldas airadas

el sexo que obedece

a todos los órdenes

de la existencia

guarda su justa proporción

y todo es congruente

incluso

la boca o

el puño

alzado

dibujando

en cualquier página

una relación

sin ningún ímpetu

sintáctico.

29 enero, 2024

INSUBSISTENTE

 

¿Puedes decir

de ti

que no

has escrito

palabras vanas?

¿Que el vacío

infructuoso y sin

fundamento

que a veces atraviesa

la ventana

de un verso

de tu universo

pudiera contener

algo

más que cáscara

inútil?

 

¡Sí!

¡Lo confieso!

¡Pequé!

¡Y obtuve el perdón!

28 enero, 2024

Basta con que cierres los ojos...

 Basta con que cierres

los ojos

para que todo desaparezca:

el frío en invierno,

la piel desnuda en verano

el equinoccio de otoño

en cualquiera de los hemisferios

y en primavera,

en primavera cualquier

término medio.

¡Así defendemos

la sutileza de las estaciones!

Con alguna

punzada de nostalgia

es verdad

pero sin miedo

a envejecer.

27 enero, 2024

Te quejas como un viejo...

 ¡Te quejas

como un viejo!

Pero no se te ha caído

el pelo y no

necesitas

los rubores

de la cosmética.

Es verdad que hay

días en que las ojeras

cada vez más

desnudas y resecas

que bordean tus ojos

parecen las de tu madre

y te cuesta

sonreír.

Pero no tienes

malas carnes y desnudo

o cubierto de barro

hasta podrías

ser deseable

nuevamente.

26 enero, 2024

Miras la noche...

 

 

Para Olivia C.F.

Miras la noche

con tus ojos

claros

con el asombro

de la sencillez

y yo quisiera

tener verdes

las pupilas

y ser

de nuevo

inocente

o la luna

que miras

con tus ojos claros.

25 enero, 2024

¡Quiero salir!

 

¡Quiero salir!

¡Ya no me contengo

dentro

de mí mismo!

24 enero, 2024

Yo no estoy hecho para hacerme viejo...

 

Yo no estoy

hecho para hacerme viejo

ni para

que los caminos

me esperen

con sus nubes de polvo.

Yo quiero volver

a ser

aquel héroe viajero

enfrentado al peligro

de los hombres

y a las tentaciones

de las sirenas

y ser

recibido a mi regreso

por una multitud

de gloriosos clarines.

23 enero, 2024

Aquel niño en el olivar...

 

Aquel niño

en el olivar

siempre quiso

ser un héroe

enmascarado

y ahora que

por fin

lo ha conseguido

todos ven en

sus ojos

la misma distancia

idéntica frialdad

la indiferencia

como si no quisieran

o se negaran

a ser rescatados.

Entradas más recientes Entradas antiguas Inicio