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10 junio, 2023

 

Voy a imaginarte poseída para poseerte,

coronada de amapolas frente a un espejo

de mujeres equilibradas, voy a llorar

infinitamente mientras busco una palabra

que te haga latir más deprisa el corazón,

voy a abrir la ventana a estos pardales atroces

y a darles por migajas el plumón de tus miembros

para que así, ultrajada, rezumes tu presencia deseable

y huelas a piel, a carne y a colchón urgente

para después a mis ojos, anhelante,

insinuarte mientras una multitud

de hombres espantados viene a escuchar el recado

de que desnuda de cualquier sombra

eres alada y carne de mi experiencia.

 

En este acto nocturno de paloma asustada

sollozas un instante y al momento ríes

como un clarín con el que incitas a la sed

y a apaciguarla te lanzas

para de nuevo querer beber.

 

Vamos, ángel, o ángela, conmigo,

como abejas en la noche que desfallece,

vamos ambos desplegando la vida

y a mordeduras dibujando el pez moreno de tus ingles.

 

Ayer te conocí panal breve

y etéreo mensajero de fuego,

y apenas llegado a casa

me tenías el cielo preparado.

Hoy me lloras sin lágrimas,

el miedo oculto entre mis cabellos,

sabedora al fin de que soy nada

y eres nada sobre la tierra desnuda.

 

¿Que podrá entonces anunciarme, qué conmovida

simiente dejarme en este poema

si Jerusalén está lejos

y nuestra alma es breve?

31/01/1996

Badajoz

[El ángel metálico]

09 junio, 2023

 

Doy a los cuervos

mis ojos

a beber,

mi lengua

para nuevos diluvios,

mis pasos

para que crezcan caminos,

todo lo que sé

a los ásperos vientos.

¡Lo doy todo!

A la amarga locura de los ríos

una gota de sangre

en cada piedra,

que rompa en gritos

y cóleras a estos

que sienten

por el corazón de los cuchillos.

Y cuanto más abro las manos

y me reparto a los

volcanes maduros

me voy haciendo

madera de

olivo

para el oficio

de Noé.

Badajoz

29/01/1991

08 junio, 2023

 

Otra vez una sombra

desde el cielo

me viene oscureciendo

y sobre mí a todas horas

me mira infinitamente

y no se sacia

de este misterio de hombre en silencio.

 

Lenta e inquieta el ala

me acaricia seductora

hasta la piel trémula

haber reconocido su aéreo ser.

 

Pero la irrealidad real

del lugar del que desciende

me cuaja en los labios una duda.

 

Permanecieras así,

sobrevolándome

el alma, sin querer nada

más, esta noche y otra

y creería en ti o al menos

en la ilusión de que continúas presente.

24/01/1996

Badajoz

[El ángel metálico]

07 junio, 2023

 

¡Si yo supiera la palabra, la que a veces

creo pronunciar en un leve silencio interior,

esa sin la que el universo no tiene sentido!

 

Prendido a una vana añoranza oigo

esta lluvia insistente, golpear

y hasta aquí traer el augurio de que existes,

 

y aunque en el vértigo de desear

y no poder pronunciarte se me va

un día y otro incierto,

 

nada aleja este enigma

y lo que ignoro de ti.

24/01/1996

Badajoz

[El ángel metálico]

06 junio, 2023

 

¿Con qué alas te he de alcanzar

por esos rascacielos de espuma

donde, como el viento, golpeas

y coronas lejos del mundo?

 

Gaviotas, pido gaviotas apenas,

no ya imperiales águilas

o ángeles impolutos.

 

Tan sólo blancas y cenicientas

gavinas, o un colimbo

capaz de volar con sólo el nombre

por el zarzal de tu pubis.

23/01/1996

Badajoz

[El ángel metálico]

05 junio, 2023

LLUEVE APENAS SOBRE TU CORAZÓN

 A Paloma González Prieto

Arca sin diluvio

esperamos el paso de

una nube,

un pecado torrencial

que anegue esta

sequía monótona

de versos y humanidad.

 

Paloma está dormida

sobre la rama

de olivo,

olvidando el dolor

de los muslos descarnados,

con el pico entreabierto

y la aceituna mensajera

olvidada junto al tronco,

esperando la señal

de reclamar su boca.

 

Toda la tierra es

cima, cumbre, cielo

sarcástico

y adormecido.

 

¿Quién nos eligió

redentores carpinteros

en esta ciudad

incrédula?

 

Dos noches después

una pareja copula

desvergonzada

arrodillada frente al horizonte

y en el sopor de los cuerpos

entregados dibujan una

biografía de obsesiones

y nostalgias en el porvenir.

 

¿Seremos tu y yo?

 

Quizá. Ella yace acostada,

cubierta aún de limos

antiguos y vegetación mientras

los senos le nacen

a la madrugada, y él

escucha el sigilo de una lágrima

impetuosa

que en la pupila late,

aunque tampoco este dolor

inundará nada.

Finales 1990/principios 1991

24/01/1996

[El ángel metálico]

04 junio, 2023

 

Una luz descarnada

por la sombra de tu pelo

me desea desesperadamente

y te ofrece a la exploración,

como un cuerpo

desnudándose invita

a trepar a lomos del águila.

 

De repente la lluvia

y con ella la arena y la ausencia

hasta cuajárseme en los ojos

un pálido reflejo de ti misma

sentada en mi memoria.

 

Es entonces cuando descubro

que no lloro, que te segrego

de mí y naces mujer

de cabello largo y amazona

en los elementos

para que en mi piel te ejecutes

y honres como ángel de la arrogancia.

 

Mientras el viento

me desgasta la voz

y un palmo de gemido

me despierta bajo

estas sábanas de tinta

que poco o nada arropan,

veo como ardes en un bálsamo

de besos errantes y desnudo

aguardo a que la sombra de tu pelo

otra vez me roce el corazón.

Finales 1990/principios 1991

22/01/1996

[El ángel metálico]