Intentaré otra vez
explicarte la palabra
en vano
de eterno futuro
vestida.
Imagina un
pasatiempos
jugando con el hombre
y me verás bajo su
huella.
¡Pero, espera!
Esa mano
de
mujer
que de repente me
saluda,
desmiente el
laberinto
y no es la muerte de
labios rojos,
sino el término
dorado
donde principia la vida.
29/01/1983
Salamanca
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