El
hombre el hombre el hombre
que
junto a la plaza se escuda
tras su
medallón de piedra caliza espera
la
próxima barca hacia la laguna.
Es
noviembre, mes de aniversarios y de sembrar
ajos y
bufones, tal vez tiempo de una última
confesión,
tiempo de admitir algunos pecados
de
pensamiento, aunque nunca el insaciable
apetito
de la destrucción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario